Hace unos días, mi amiga Cat Donohue, conductora del programa de Radio Nopal, Crónica, estaba preparando un especial para el 8M y me envió algunas preguntas: ¿Qué opinas sobre este 8M? ¿Por qué decides participar o no en la marcha hoy?
Hace un par de años ya que dejé de militar activamente en el feminismo, por varias razones. Por un lado, siento que se ha normalizado una cultura punitivista, y por otro, la cooptación del movimiento es evidente. ¿De verdad queremos militar en el mismo movimiento que JK Rowling? Al mismo tiempo, los medios de comunicación, el estado y el sistema en sí mismo han cooptado el feminismo, y aquí radica la esencia de mi reflexión actual. ¿Realmente nuestra meta era construir un Estado feminista?
Esta mañana estaba leyendo un artículo de la Revista Anfibia titulado "Cómo Afrontar la Crueldad Organizada", donde Sonia Tessa escribe:
"Durante los últimos 40 años, las feministas le reclamaron al Estado que generara las condiciones para una mayor igualdad. Pero ahora, lo que está de moda es dinamitar el Estado."
Al principio pensé: ¡Wow, si está de moda dinamitar el Estado, entonces hay que celebrarlo! Pero sabemos que se hace referencia al gobierno de Milei. Esto nos lleva de vuelta a la discusión sobre lo que realmente significa el anarquismo y lo que es y no es Milei. Desde mi perspectiva, con todas las decisiones que ha tomado hasta ahora, el Estado sigue bastante presente.
Un breve paréntesis aquí para ser críticos cuando se habla de desarticular el Estado, especialmente cuando se asume inmediatamente como algo negativo y se coloca al feminismo en el lado opuesto.
Esto me hizo reflexionar sobre algo que no había identificado inicialmente en el por qué ya no me identifico activamente como feminista, pero que reafirma mi decisión. ¿Existe un feminismo anti estatista? Seguramente sí, pero desarticular el Estado casi nunca aparece en las consignas feministas.
Este año decidí no unirme a la marcha del 8M y, en general, ya no participó en manifestaciones, ya que suelen centrarse en demandas al gobierno y al Estado. Últimamente prefiero dedicar mi energía a la acción directa y al apoyo mutuo.
Hace algún tiempo entrevisté a Leonor Silvestri, y en esa ocasión hablaba sobre cómo el feminismo se había convertido en el discurso hegemónico, y era tarde para salvarlo. Simplemente había que abandonarlo. En ese entonces eran pocas las voces que hablaban desde este punto de vista, pero ahora, veo a más compañerxs tomando este camino y en gran parte por no sentirse cobijados por un movimiento al que siempre le ha costado abrazar a las mujeres racializadas, trans, trabajadoras sexuales y otras múltiples identidades.
Y sí, el feminismo parece que se convirtió en el discurso hegemónico, instrumentalizado por políticos y empresas. Pero se convirtió también en un deber ser que en el proceso no supo diversificarse. Y por eso vuelvo a la pregunta inicial: si el objetivo todo este tiempo fue construir un estado feminista, un gobierno feminista, una ideología monolítica, sin duda nos desviamos mucho del camino.
Pame.
pd. Puedes escuchar el episodio especial de Crónica 8M aquí
Alegría Emergente
Hace alguno mese te conté sobre la colaboración entre Autonomías y Un sueño largo, ancho y hondo, el podcast de Alf Bojorquez, para crear el podcast Alegría Emergente.
Finalmente salieron los tres primeros episodios de este experimento sonoro.
Alegría Emergente surgió de la traducción colectiva del libro Militancia Alegre de carla joy y Nick Montogomery. Un libro muy relacionado con la reflexión inicial del boletín de hoy y que habla de como nuestros movimiento se vuelven rígidos y tristes alejándonos de lo que luchábamos inicialmente.
En las primeras reflexiones de este podcast hablamos de una gran variedad de cosas. De la verticalidad de nuestros movimientos, de cómo a veces desechamos a las personas, como construir autonomía en la ciudad y que significan realmente los cuidado colectivos. También hablamos sobre las militancias de nuestros amigues que van desde la lucha por el agua y el territorio, la erradicación de la deuda y la tarea de hacer pan.
Ha sido un proceso muy bello y sobre todo un espacio muy necesario y para cuestionar nuestros movimientos y andares.
Este podcast se pudo realizar con el apoyo del Institute of Anarchist Studies, Agency y el Jen Angel Media Grant. Ya lo puedes escuchar aquí.